En 1798, el Presidente John Adams
firmó una ley basada en la autoridad federal para regular comercio
exterior e interestatal que creó el Hospital del Servicio Marítimo
(HSM). El HSM comprendió una
serie de hospitales contratados, situados en puertos de los ríos,
lagos y océanos de la nación que cuidaban a los marinos mercantes
cuando enfermaban durante un viaje. Los marineros contribuyeron con
20 centavos por mes de la paga de sus servicio, el cual fue manejado
por un administrador en el Departamento del Tesoro en Washington,
D.C.